04 de Octubre de 2023, (10:20 hrs).-Un fuerte terremoto de magnitud 6.4 sacudió la madrugada de este sábado a Nepal, cobrando la vida de al menos 157 personas y dejando a más de 150 heridos. El epicentro se ubicó en el distrito de Jajarkot, en una región montañosa de difícil acceso.
Tras el poderoso terremoto, al menos 105 personas perdieron la vida, y otras 81 resultaron heridas. Las operaciones de rescate se ven obstaculizadas por la falta de infraestructura y comunicaciones en la zona.
Impacto mortal en Rukum occidental
El vecino distrito de Rukum Occidental también sufrió graves consecuencias, con 52 personas fallecidas y 85 heridas como resultado del sismo. El acceso a estas regiones montañosas es complicado, dificultando aún más las labores de rescate.
La topografía montañosa y la falta de infraestructura en las áreas afectadas han planteado desafíos significativos en las operaciones de rescate. La ausencia de redes de telefonía móvil y electricidad agrava la situación, dificultando la coordinación y la asistencia.
Un sismólogo del Departamento de Geología gubernamental, Mukund Bhattarai, afirmó que el elevado número de víctimas en Jajarkot y Rukum Occidental se debió a la estructura de las casas en la región.
“Muchas de las casas en estas zonas están construidas con barro y piedra y están edificadas sobre terrenos escarpados”, dijo, comparando el sismo con otros similares en otros distritos donde las estructuras son más resistentes.
Infraestructura precaria
Aunque Nepal es propenso a desastres naturales, su población mayormente pobre carece de infraestructura adecuada para enfrentarlos. La falta de viviendas resistentes a los terremotos y la precaria situación de muchas personas hacen que eventos como este tengan un impacto devastador.
El Ejército nepalí movilizó recursos, incluyendo helicópteros y aviones, para evacuar a los heridos a centros de atención médica en Nepalgunj y Katmandú. Sin embargo, la magnitud de la tragedia y las dificultades logísticas presentan un desafío muy complicado.
Este terremoto recuerda el devastador sismo de 2015, que dejó casi 9 mil muertos y más de 22 mil heridos, causando daños por valor de miles de millones de euros. A pesar de los esfuerzos de reconstrucción en curso, la región sigue siendo vulnerable a eventos sísmicos.