29 de abril de 2025.-El cónclave para elegir al próximo papa comenzará el 7 de mayo, anunció el Vaticano el lunes, preparando una votación que decidirá el futuro de la Iglesia católica tras la muerte del papa Francisco la semana pasada a los 88 años.
Ahora los cardenales disponen de poco más de una semana para debatir, hacer campaña y conocer a todos los posibles aspirantes, algunos de los cuales probablemente tratarán de seguir el énfasis de Francisco en un enfoque pastoral, mientras que otros representarían un retorno a un estilo más tradicional.
Decenas de cardenales se han reunido desde la muerte del papa para decidir los detalles logísticos del duelo papal, pero también para debatir los temas principales a los que se enfrenta la Iglesia y elegir la fecha en que los cardenales electores se reunirán en la Capilla Sixtina para votar por el sucesor de Francisco.
Los cardenales volverán a reunirse el martes por la mañana, y el politiqueo se intensificará ahora que se ha establecido una fecha para elegir al próximo pontífice.
Eso quedó claro el lunes, cuando los cardenales debatieron la relación de la Iglesia con el resto del mundo y con otras religiones, la evangelización, los abusos sexuales en la Iglesia y otros retos, así como la fecha del cónclave. En la reunión, añadió un portavoz del Vaticano, se abordaron las cualidades que debe tener el nuevo papa para responder a estas cuestiones. Además de las posturas de los candidatos, su edad y país de origen también influirán en las deliberaciones, dijeron los expertos vaticanos.
Solo participaron en las reuniones unos 100 de los aproximadamente 130 cardenales —solo los menores de 80 años— y quienes pueden votar en la elección secreta, dijo el Vaticano. Otros llegarán a Roma en los próximos días.
Se necesita una mayoría de dos tercios para elegir a un nuevo papa, y los cardenales no pueden abandonar el cónclave hasta que se nombre a un sucesor, salvo en casos excepcionales.
Por lo general, un cónclave debe comenzar entre 15 y 20 días después de la muerte del papa; este comenzará 16 días después de la muerte de Francisco. En 2013, Francisco fue elegido en dos días.
Se eligió el 7 de mayo en parte porque daría tiempo suficiente para los preparativos, dijo Matteo Bruni, portavoz del Vaticano, durante una conferencia de prensa. Ahora comenzarán los preparativos para la reunión en la Capilla Sixtina, que incluyen la instalación de los hornos en los que se quemarán las papeletas tras cada ronda de votación, añadió Bruni.
Durante el cónclave, los espectadores observan una chimenea situada en lo alto de la Capilla Sixtina para saber si se ha elegido un nuevo pontífice. Si no se ha llegado a un consenso tras la votación, sale humo negro. Cuando se ha elegido un papa, el humo es blanco.
El 7 de mayo, la jornada comenzará con una misa en la Basílica de San Pedro, tras la cual los cardenales entrarán en la Capilla Sixtina para votar.
La palabra “cónclave” —del latín “con llave”— se refiere al aislamiento que se les impone, destinado a evitar que el proceso electoral se alargue.
La mayoría de los cardenales se alojarán en la Casa Santa Marta, que se construyó por orden del papa Juan Pablo II para sustituir a las habitaciones improvisadas en el palacio papal que los habían albergado anteriormente. Pero como Francisco nombró muchos más cardenales que sus dos predecesores, algunos se han preguntado si habrá espacio suficiente para todos.